Personalidad

La etimología del término "personalidad" se ha fijado en diferentes orígenes. Se destacan el persa "phersu" o demonio y el griego "prosopon" que era la careta o máscara que los actores griegos utilizaban para identificarse en la escena, en este contexto la personalidad adquiere un significado social: la capacidad que se tiene para desempeñar un rol en la sociedad. Solo más tarde el termino deriva en el latín "personalitas" que pasa a expresar la esencia o elemento más interno de la persona, el que toda persona lleva consigo por la razón de serlo.

Frecuentemente, cuando hablamos sobre la personalidad de alguien, nos referimos a lo que diferencia a esa persona de los demás, incluso lo que le hace única. A este aspecto de la personalidad se conoce como diferencias individuales. Para algunas teorías, esta es la cuestión central. Éstas prestan una atención considerable a tipos y rasgos de las personas, entre otras características, con los cuales categorizar o comparar. Algunas personas son neuróticas, otras no; algunas son más introvertidas, otras más extravertidas, y así sucesivamente.

Sin embargo, los teóricos de la personalidad están también interesados en lo común de las personas. Por ejemplo, ¿qué tienen en común un neurótico y una persona sana?. O, ¿cuál es la estructura común en personas que se expresan de forma introvertida y en aquellas otras que se expresan de manera extravertida?.

Si uno coloca a las personas en una cierta dimensión (como sano-neurótico o introversión-extraversión) estamos diciendo que las dimensiones son algo sobre lo que podemos situar a los sujetos. Ya sean neuróticos o no, todas las personas tienen la capacidad para dirigirse hacia la salud o hacia la enfermedad, y ya sean introvertidos o extravertidos, todos oscilan entre una vía y la otra.

Otra forma de explicar lo anterior es que los teóricos de la personalidad están interesados en la estructura del individuo y sobre todo sobre la estructura psicológica; es decir, cómo se "ensambla" una persona, cómo "funciona", cómo se "disgrega".

Algunos teóricos van un paso más allá, sosteniendo que están buscando la esencia de lo que hace a una persona. O dicen que están preocupados por lo que se entiende como ser humano individual. El campo de la psicología de la personalidad se extiende desde la búsqueda empírica simple de las diferencias entre personas hasta una búsqueda bastante más filosófica sobre el sentido de la vida.

Desde una perspectiva académica la personalidad se ha centrado en el análisis de la estructura interna de la persona, pues ha sido comprendida como el número y naturaleza de sus componentes, dimensiones o rasgos, lo que ha centrado el estudio sobre la "consistencia" de la personalidad sobre el "cambio" de la personalidad. Se ha optado entonces por un modelo de personalidad consistente en la elaboración de una "taxonomía" en la enumeración de sus componentes. Sin embargo para ampliar la comprensión de la personalidad también se puede concebir la personalidad y estudiarla como un "proceso" más cercano al concepto de personalidad como "sujeto psicológico". Así Smith y Gallo (2001) proponen que "la personalidad se refiere a los procesos a través de los cuales los pensamientos, emociones, y conductas individuales son coherentes dentro de patrones significativos en el tiempo y a través de las situaciones".

Algunos elementos que deben estar incluidos en el estudio de la personalidad son:

1. La personalidad es un proceso

2. La personalidad es situacionalmente interactiva.

3. La personalidad es un sistema de procesos que se autorregulan, en donde las cogniciones, emociones y conductas son los tres elementos básicos que en su interacción forman la personalidad.

4. Como un sistema psicológico singular del sujeto.